Suavemente lunar por lunar, cicatriz por cicatriz rasgarte la piel, la carne, el alma; porque mis manos descubrirán lo más oculto que guardas que tienes para darme, lo que enclaustras en tu mirada pervertida.
Tu respirar que se pierde en la mía, exhausta de tantos viajes, cervezas, recuerdos, promesas, sueños... sueños que penetras con tu labios rotos, uñas encarnadas en mi piel, caricias y ojos perdidos y me obligas a desearte, a tocarme, pero trato de guardar la compostura solo tomo una taza de café y abro los ojos para no sentir mas hormigueo en mi entrepierna, para despertar y revolcarme en la cama...
...Enviciada por tu cuerpo con el anhelo de querer tenerte ya mismo.